Junior fracasó nuevamente en sus aspiraciones de avanzar a la final del fútbol profesional colombiano, al caer 2-0 de visita ante Millonarios, a  pesar de jugar gran parte del duelo con uno más, en el estadio El Campín de Bogotá, para ajustar su sexta eliminación seguida. 

Luis Amaranto Perea y sus muchachos ajustaron seis eliminaciones consecutivas: dos en Copa Libertadores, una en Copa Sudamericana, una en Copa Colombia y ahora dos en Liga Colombiana. 

El arranque no pudo llegar más cargado de infortunio para la la visita. Junior, ese que le apostaba a desesperar con el paso de los minutos al rival, a los dos minutos ya estaba concediendo la oportunidad a los bogotanos de que se pusieran a la par en el tanteador. 

En una pelota cruzada a los 2 minutos, en un tiro de esquina, Willer Ditta marcó a Cristian Arango, que sacó un remate de espaldas que fue cortado por una imprudente mano del defensor central, en una jugada que el juez principal Jorge Tabares señaló el penal. 

Frente a la pelota se paró Fernando Uribe que sacó un remate al palo derecho de Sebastián Viera, quien voló completamente engañado al poste contrario para que los bogotanos pusieran el 1-0 y quedara la serie igualada a tres goles de entrada. 

Junior no se pudo reponer del golpe, y a los 11 minutos vio nuevamente cómo una pelota cruzada los volvió a comprometer, en una acción desde la banda derecha, que tomó nuevamente mal parados a los defensas, especialmente a Willer Ditta y Germán Mera.

Fernando Uribe atacó el centro lanzándose al aire con una plancha, que mandó la pelota directamente a las redes para aumentar la cuenta a 2-0, ante un Junior que lucía completamente impotente de reaccionar. 

El partido pintaba para tragedia deportiva en las primeras de cambio, pero ahí apareció el VAR para poner un tinte adicional de drama a lo que hasta ese momento se vio en el campo de juego. 

Carmelo Valencia fue derribado en un momento en que picaba al espacio por Breiner Paz y tras la revisión del VAR se determinó que fue jugada de último hombre, por lo cual Tabares le enrostra la tarjeta roja para dejar con uno menos a los bogotanos.

De ahí en adelante el panorama del juego fue otro. Junior apretó y le tiró el cuerpo encima a Millonarios, lo metió contra su arco y la meta de Viera fue un destino abandonado totalmente por los de Alberto Gamero, que se dedicaron a defender una ventaja que los metía en la final. 

Sin embargo, lo más que logró producir Junior fue un tiro de media distancia de Freddy Hinestroza a los 38 minutos, que despejó con una sensacional estirada el portero Cristian Vargas, para mantener a los ‘embajadores’ con dos goles de distancia. 

Con la llegada al descanso luego de un primer tiempo que fue poco vistoso y lleno de muchas fricciones, Luis Amaranto Perea tenía que manejar la situación y buscar recomponerse de cara a la segunda mitad, pues no podía dejar ir de sus manos la posibilidad de la final.

Para ello, sacó de la cancha a un amonestado y flojo Ditta y a un irregular Fabián Viáfara, para darle espacio a Homer Martínez y Marlon Piedrahíta, respectivamente, y así mejorar la parte posterior del equipo y así animarse más en el segundo tiempo. 

Los nuevos bríos de Junior empujaron a Millonarios otra vez contra su arco, e incluso a los 55 estuvieron cerca de empatar nuevamente la serie, cuando Larry Vásquez soltó un gran pase en la media luna para asistir a un Hinestroza que en el mano a mano la mandó por encima de la cabaña azul. 

Los ‘Tiburones’ insistían con todo lo que tenían y llegaron a poner a los 10 jugadores del local contra el arco de Vargas, que nuevamente se lució a los 62 minutos cuando Didier Moreno le sacudió las manos con un potente remate de media distancia. 

Perea terminó de jugar sus cartas al mandar al campo a Luis Sandoval, Juan David Rodríguez y Daniel Moreno en procura de salvar el compromiso. 

Sobre el final, Viera volvió a darle una oportunidad de permanecer en la pelea a los suyos, cuando atajó una pelota de gol rematada de media distancia por David Macalister Silva. 

En el tiempo de adición, los barranquilleros se quedaron con uno menos tras la expulsión de Larry Vásquez, por agredir a un contrario, en una pequeña pelea que se formó en el área bogotana. 

Tras el pitazo hubo golpes entre unos y otros y unos desbocados Viera, Martínez y Didier agredieron a Ricardo Márquez, quien al parecer algo les dijo a los rojiblancos que los sacó de casillas. 

Así las cosas, una vez más, Junior se quedó con las manos vacías al final del semestre y a la espera de las reflexiones que puedan hacer sus directivos. Y es que en honor a la verdad, los ‘Tiburones’ nunca llegaron a ser el equipo que debían. 

Ahora los partidos serán en el mercado: el pase de Miguel Ángel Borja, la renovación de Teófilo Gutiérrez y la consecución de refuerzos que puedan blindar las falencias que tanto costaron.